jueves, 8 de diciembre de 2022

EL INDIO DE SEVILLA

 


Hoy os presentamos la obra de nuestro editor, Carlos San José, y que nos llena de satisfacción el poder entrevistarlo.

Con más de catorce años de experiencia en el mundo de la edición, ¿por qué te decidiste a sacar esta obra?

La historia del Indio de Sevilla la tenía dándole vueltas desde hace muchos años. Siempre me impresionó ver a aquel personaje, en pleno invierno, y cuando todos íbamos abrigados con chaquetones, observarlo con el torso desnudo y portando su arco y flechas, como si fuera realmente un indio, a todos los que lo conocimos pensábamos que era un tipo raro más, pero que estaba muy bien integrado en nuestra ciudad.

Entonces, ¿la novela es biográfica?

En gran parte, sí. Podríamos denominarla ficción-biográfica, ya que muchas de las vivencias que le ocurren al Indio son verídicas, pero en otras ocasiones, como por ejemplo, la amistad con otro sintecho llamado Fabián (que también deambuló por las calles), Vicente el del Canasto, María, la de los paraguas negros, no sé si realmente entabló alguna comunicación con ellos, pero quise darles ese protagonismo que también tuvieron, ya que eran otras personas peculiares que estuvieron en aquella época.

¿Te centras en la vida del Indio o hay algo más que nos quieres contar?

La vida de este personaje es el punto central de mi obra, pero al narrar sobre una época determinada, también los acontecimientos que ocurrieron son parte de la novela, los problemas que había de la droga, aquellas pelis de quinquis que ensalzaban a los delincuentes como si fueran héroes, el programa de Jesús Quintero que sacaba del ostracismo a estos personajes raros que pululaban nuestras calles...

                                                                    Carlos San José

En la portada del libro aparece la estatua que hay en la Avda. Kansas City de la ciudad de Sevilla, ¿no puede dar confusión y parecer que estás hablando de la vida del indio del monumento?

En eso puedes tener razón, pero por motivos de derechos de autor y de privacidad, no pude poner la foto del personaje real (y hay muchas fotos que se pueden encontrar por Internet). Mi idea era que saliera la foto del indio verdadero, la de Ángel de la Rosa, pero como te digo, podría haber tenido problemas con sus familiares, y entonces decidimos entre la editorial y yo poner la foto de la estatua.

Esta historia también da para hablar sobre ella, ya que es un hermanamiento entre la ciudad de Kansas City y Sevilla y que empezó en 1920 cuando el alcalde de la ciudad estadounidense visitó Sevilla y se enamoró tanto de la nuestra que quiso hacer la réplica de la Giralda y de la plaza Virgen de los Reyes en la suya, pero le pusieron muchas trabas y no la construyeron. Luego, pasado el tiempo, en 1966, otro alcalde sí lo consiguió y se invitó al alcalde de Sevilla a la inauguración de las réplicas, y para hermanar aún más ambas ciudades, se cambió la rotulación de la Avda. San Pablo por Avda. Kansas City.

En la Exposición del 92 en Sevilla, trajeron una réplica del indio que hay en Kansas City y se la regalaron al pueblo hispalense, y por eso podemos ver esta estatua en la Avda. Kansas City, justo al lado de la estación de trenes de Santa Justa, y enfilando la calle del Greco.

¿Qué has pretendido al escribir el Indio de Sevilla?

En primer lugar, quitarme esa espinita de poder escribir un libro, y aunque es una novela corta de tan solo 130 páginas, después de estar rodeado siempre de libros, de estar corrigiendo multitud de obras de otros autores, quise dejar mi pequeño granito de arena escribiendo la mía propia. Pero la razón principal era dejar por escrito la vida del Indio de Sevilla, y no solo de él, sino de tantos y tantos sintecho que malviven por las calles y que todos tienen una historia que contar; en muchas ocasiones te sorprenden, como me pasó a mis amigos y a mí cuando éramos jóvenes y escuchábamos las historias de Fabián que me calaron bastante y la narro en la novela.

Bueno, pues te deseamos toda la suerte en la ventas de tu libro.

Muchas gracias, sobre todo, me gustaría que se supiera la vida de este personaje y que no cayera en el olvido. Si con esta obra lo puedo conseguir, estaré muy satisfecho.



sábado, 19 de noviembre de 2022

¿Eres un escritor de brújula o de mapa?

 



Me encanta la clasificación propuesta por Javier Marías que dividió a los escritores de dos maneras muy acertadas: escritores brújula y escritores mapa. Estas dos propuestas definen cuál es la manera de acercarse a los textos y a la creación literaria de algunos escritores. El escritor brújula es el que sabe de dónde sale pero no sabe a dónde quiere llegar, es el tipo de escritor que se deja llevar por su intuición y deja que  la imaginación y sus ideas lleven el timón de su escritura sin preocuparse por planificar ni  estructurar la trama de su novela que poco a poco toma forma de una manera más espontánea; el escritor mapa, en cambio, se traza un camino a seguir planificando la estructura, los personajes, la trama, el argumento… es decir, el escritor mapa organiza de manera metódica lo que va  a escribir y sabe muy bien hacia dónde se dirige. Se trata, pues, de dos tipos de escritores muy diferentes y cada cual se identificará más o menos con uno de ellos o quizá se verá más como un escritor a mitad camino entre el escritor brújula y el mapa, que es lo que ocurre en la mayoría de los casos.

1. Escritor brújula: sus puntos fuertes

  • Una idea o una frase es lo único que necesita este tipo de escritor para comenzar con su historia. Se pone a ello y se deja llevar sin darle muchas más vueltas al asunto. Lo bueno de trabajar con esta espontaneidad es que las ideas conservan sus frescura porque el escritor no les ha dado demasiadas vueltas con lo cual las posibilidades creativas son muchas.
  • La originalidad suele ser una característica de estas novelas, envueltas en un toque más personal y sin ataduras a un plan previo o incluso a un género.
  • El escritor deja que personajes y trama se vayan creando de una manera más libre y espontánea dejando la mente en total libertad y a partir de esta libertad a la hora de escribir, pueden surgir aspectos muy interesantes de la novela que ni se imaginaba si lo hubiera planificado todo y hubiera seguido un plan concreto.

La contrapartida de ser un escritor brújula y dejarse llevar por las ideas es que el resultado final quizá necesite más correcciones y más reescritura. Es muy posible que haya demasiado texto escrito por impulso y el escritor tendrá que recurrir a las tijeras para eliminar lo que sobra. Además, escribir de manera tan espontánea puede  generar errores en la trama e incoherencias en la historia que el autor tendrá que revisar bien en la fase de reescritura.

«Hay dos tipos de escritores: los jardineros y los arquitectos. El arquitecto planifica toda la casa antes de martillar el primer clavo; dibuja esquemas, sabe cuán profundo debe cavar para hacer el sótano, cuántas habitaciones habrá y dónde irán las tuberías. Luego tenemos a los jardineros que cavan un agujero, plantan una semilla y la riegan con su sangre, y después ven qué sale e intentan darle forma. Soy más jardinero que arquitecto». George R. R Martin (Autor de Canción de hielo y fuego

 2. Escritor mapa: sus puntos fuertes

  • Si te quedas sin ideas, no será tan grave porque ya tendrás un “mapa” de tu novela y podrás seguirlo hasta terminar tu historia: dependes menos de la inspiración y más de un trabajo eficiente y organizado de planificar tus ideas antes de ponerte a escribir
  • El escritor mapa incurre en menos incoherencias tanto en la trama como en los personajes y la historia en general suele estar mejor hilvana, sin tantos flecos en el argumento como le ocurre al escritor brújula.
  • Es más sencillo corregir y revisar la novela de un escritor mapa porque la lectura es más navegable y el lector no se pierde porque la estructura es más sólida y el conjunto se nota más cuidado.
  • El trabajo de reescritura será menos complicado porque los errores son más detectables ya que al tener una planificación previa, el escritor puede ver si se ha desviado del plan inicial, qué le ha faltado o que le sobra en el conjunto de su novela.


Escritores principalmente de mapa

  1. J.K. Rowling, autora de Harry Potter: planificó cada novela de la serie capítulo por capítulo y escena por escena. De hecho, publicó algunos de sus esquemas en Internet.
  2. John Grisham, autor de Tiempo de matar: «No comienzo una novela hasta que haya vivido con la historia un buen rato, al punto de escribir un esquema. Después de tantos libros, he aprendido que cuanto más tiempo paso haciendo un esquema, más fácil se hace escribir el libro. Si juego sucio cuando hago el esquema el libro me da problemas».
  3. Sylvia Plath, autora de La campana de cristal: como Rowling, también hace esquemas de lo más detallados. Elaboró uno para su novela La campana de cristal, la cual relata sobre su propio descenso a la locura.

Escritores principalmente de brújula

  1. Stephen King, autor de El resplandor: puede que Stephen King sea el único en esta lista que se encuentre en un extremo, aunque no me atrevo a asegurarlo. Para empezar, dice que «Los esquemas son el último recurso para los malos escritores de ficción que desearían estar escribiendo una tesis». Añade: «Desconfío del argumento por dos razones: la primera, porque por lo general nuestras vidas carecen de argumento, incluso cuando tienes en cuenta todas las precauciones razonables y te planificas con cuidado; la segunda, porque creo que planear una trama no es compatible con la espontaneidad de la verdadera creación».
  2. George R. R. Martin, autor de Canción de hielo y fuego: en una entrevista con Joe Abercrombie, Martin dijo: «Hay dos tipos de escritores: los jardineros y los arquitectos. El arquitecto planifica toda la casa antes de martillar el primer clavo; dibuja esquemas, sabe cuán profundo debe cavar para hacer el sótano, cuántas habitaciones habrá y dónde irán las tuberías. Luego tenemos a los jardineros que cavan un agujero, plantan una semilla y la riegan con su sangre, y después ven qué sale e intentan darle forma. Soy más jardinero que arquitecto».
  3. Margaret Atwood, autora de El cuento de la criada: afirma que no puede escribir pensando primero en la estructura. Se guía por algo efímero, como un sonido o una imagen, y los detalles nacen al escribirlos.
Extraído de la página Ana Vidal

jueves, 3 de noviembre de 2022

¿Cómo se reparte el pastel en la venta de un libro?


 




El autor es el que menos porcentaje se lleva en las ventas de sus ejemplares.
En la editorial convencional solo recibe el 10 % de las ventas.
En las editoriales en las que contribuye al pago de la edición se suele llevar entre el 35 % o el 40 %.


¿Cómo se reparte la tarta entre todos los que participan en la elaboración de un libro?
Una librería más la logística se quedan con el 55 % del precio de un libro, el 2O % es para la imprenta que imprime el ejemplar, y solo queda otro 25 % a repartir entre editorial y autor.
Y de ese 25 % nosotros repartimos a nuestros autores el 50 % de los royalties.

Porque queremos tener la misma ganancia que el escritor, ya que el esfuerzo es mutuo entre editorial y autor.


Somos la editorial que damos más ganancias en el reparto a nuestros autores porque intentamos que estén satisfechos al publicar en nuestro sello de edición.


info@editorialcm.com

miércoles, 26 de octubre de 2022

MAQUETACIÓN Y DISEÑOS DE PORTADAS

 


Aparte de nuestras publicaciones, también trabajamos para editoriales y autores que nos contratan los servicios de corrección, maquetación y diseños de portadas, así como la impresión de sus libros.

Las maquetaciones las realizamos con el programa de diseño InDesign. Se trata de una maquetación profesional y llevamos realizadas más de 1400 maquetas a lo largo de estos quince años en el mundo de la edición.

Tenemos los mejores precios de maquetas.

Dos ejemplos:

Maqueta de un libro de 300 páginas en texto corrido: 100 euros.

Maqueta de un libro de 600 páginas con 75 imágenes: 170 euros.

La limpieza del Word de dobles espaciados, intros innecesarios, archivos ocultos, se tarifica aparte.

Es muy difícil igualar estos precios y por eso confían las editoriales en nuestros trabajos por calidad-precio-rapidez.

Los diseños de portadas también tenemos unos precios imbatibles.

Ejemplo:

Diseño de cubiertas: portada, contraportada, lomo y solapas

Título, texto sobre una imagen: 120 euros.

Título, texto sobre varias imágenes: 140 euros.


Si queréis más información, podéis contactar con nosotros.

info@editorialcm.com

lunes, 10 de octubre de 2022

Presentación obra Madrid Canela 1966

 

 

Este viernes 14 de octubre, haremos la presentación de la novela Madrid Canela 1966 en Sevilla.

Y la presentaremos en un sitio emblemático de la cultura hispalense: La Carbonería, en c/ Céspedes 21.

Será la presentación del escritor onubense Cayetano Santana en nuestra ciudad de su segunda obra, donde nos narra la historia de una búsqueda, sí, de qué exactamente no se sabe, pero tiene que ver con eso que todos ansiamos, la realización de una vida plena, una búsqueda que nace de la insatisfacción, del hartazgo, de un Madrid asfixiante que sueña con otras humanidades, con otros mares, con olas y soles benéficos... Y utilizar aquel tiempo gris como fondo, pero dejarlo muy atrás, simple telón de miserias y de anhelos... De personajes, de policías, de fantoches, de mandamases, de amantes y soñadores... De vida encapsulada y a punto de reventar... Con toques de novela policíaca, de novela de indagación, de thriller psicológico...

No te lo pierdas y acompáñanos el próximo viernes a partir de las 19.00h y además de hablar sobre el proceso de la escritura, podrás llevarte la obra firmada por su autor.
 

jueves, 15 de septiembre de 2022

¿QUÉ TIPO DE CORRECCIÓN NECESITAS?

 

Has terminado tu primer borrador: ¡enhorabuena! Es la hora de sentirte orgulloso de lo que has conseguido y de celebrarlo como se merece.

Quizá dejes tu manuscrito aparcado unos días para darte algo de tiempo y coger fuerzas para la siguiente parte de tu trabajo como escritor: la corrección

Si has decidido compartir tu novela con el mundo, este es un paso esencial que no te puedes saltar si quieres que ese borrador se convierta en una novela de calidad. Y no, no vale solo con pasar el corrector de ortografía y gramática que viene integrado con el procesador de textos. Piensa que lo que tienes entre manos es un diamante todavía en bruto que tienes que pulir

Si es la primera vez que te enfrentas a la corrección de tu novela, es normal que te asalten mil dudas. ¿Quién debe corregir mi texto? ¿Cuántos tipos de corrección hay? ¿Qué hace un corrector ortotipográfico? ¿Qué es un editing de una novela o ensayo? ¿Cuándo se debe corregir un texto? ¿Cuánto cuesta un corrector?

En este artículo voy a tratar de despejarte algunas de esas dudas.

Tipos de corrección

Aunque solemos hablar en singular de «la corrección» de un manuscrito, lo cierto es que existen varios tipos de corrección. Los tipos de corrección se clasifican según el nivel de intervención que requiere un texto en concreto. 

  • Corrección de concepto o contenido: es lo que se suele llamar editing o developmental editing.  Este tipo de corrección se ocupa de revisar el contenido del texto. En el caso de los libros de ficción se ocupa de problemas de fondo en la historia, la trama, el arco de los personajes, estructura, ritmo… Este tipo de corrección la tiene que llevar a cabo un editor profesional
  • Corrección de estilo: este tipo de corrección se centra en que el texto pueda leerse con claridad. Se suele decir que la corrección de estilo se ocupa de asegurar que un texto esté «bien escrito» respetando el «estilo del autor», pero esta definición suele resultar confusa y propiciar muchas discusiones. Lo que hace la corrección de estilo, en la práctica, es asegurarse de que el mensaje (a nivel de texto, de expresividad) del autor llegue al lector de la mejor manera posible. Por ejemplo, el corrector de estilo revisa la sintaxis, la estructura de párrafo, el vocabulario, la puntuación… y señala todo aquello que puede impedir que la lectura del lector sea fluida: ambigüedades, repeticiones, imprecisiones, estructuras confusas, etc.
  • Corrección ortotipográfica: es lo que la mayoría de la gente entiende por «corregir un texto». Es una corrección que se ocupa de errores técnicos en la forma del texto, tales como erratas y errores ortográficos, sintácticos, gramaticales, de puntuación… El corrector ortotipográfico también se ocupa de revisar que estén unificados los criterios tipográficos según la norma del editor (uso de negritas, cursivas, mayúsculas…).
  • Corrección de primeras pruebas o maqueta: es la última corrección del texto, tiene lugar cuando los otros tipos de correcciones ya se han realizado y se efectúa sobre el texto ya maquetado e impreso (primera prueba) o está ya listo para imprimir. En este tipo de corrección se revisa de nuevo las erratas que hayan podido quedar a la hora de dar formato al texto, y además se revisa todo lo que tenga que ver con la maqueta: las imágenes, los párrafos, la partición de palabras, los títulos, la paginación, notas, tipos de letra, etc.

¿Qué diferencia hay entre la corrección de estilo y la corrección ortotipográfica? 

Destaco esta pregunta porque es una de las grandes dudas que suelen tener los escritores a la hora de contratar un servicio de corrección de su novela. Si tú tampoco lo tienes claro, por favor, no te sientas mal: lo cierto es que hasta los correctores profesionales a veces dudan sobre lo que entra o no en cada categoría. 

No hay una línea superclara que divida una corrección de otra, sino que muchas veces nos enfrentamos a una escala de grises en la que cada decisión a tomar por parte del corrector cae más cerca de un extremo u otro del espectro. Mientras que en la corrección ortotipográfica se suelen tener referencias más objetivas a la hora de aplicar criterios de corrección de un texto (las normas de la RAE, principalmente), en la corrección de estilo se corrigen también los usos que, aunque están «permitidos» por las normas académicas de la lengua, son poco recomendables (repeticiones, pobreza léxica, ambigüedades…). La corrección de estilo supone muchas veces adaptar el uso de la lengua a la finalidad del escrito, es decir, a su receptor.

Por ejemplo, la frase: «La corrección estilística corrige corriendo cosas que si no se corrigen se entienden más mal que otras cosas que sí están más bien escritas», podríamos sugerir cambiarla por: «La corrección de estilo se ocupa de corregir el uso del lenguaje en el texto para facilitar su lectura y comprensión». 

Obviamente, el ejemplo anterior es una [pésima] exageración: lo esperable y deseable es que el corrector pueda respetar al máximo el estilo del autor, pero sin perder de vista al lector, que es el juez último del texto.

Como ves, la corrección de estilo es una tarea que lleva mucho más tiempo y las tarifas de este servicio son más elevadas. Muchos autores deciden saltarse la corrección de estilo, como una forma de abaratar costes. Sin embargo, dependiendo del estado de tu novela, este gasto suele resultar más bien una inversión beneficiosa.

La corrección de estilo es recomendable, pero la corrección ortotipográfica es imprescindible.

Orden de la corrección: editing > estilo > ortotipográfica > primeras pruebas

Pongamos que tú como autor has decido saltarte la revisión del contenido y de estilo y contratar solo la corrección ortotipográfica. Pero entonces, el corrector o tú mismo, os dais cuenta de que tu texto está plagado de errores de contenido, incoherencias, párrafos mal redactados… ¿Puedes pedirle entonces al corrector que trate de arreglar tu texto? La respuesta es NO: tú le has contratado (y pagado) para corregir la ortotipografía, nada más. ¿Puede corregir la ortografía del texto y después ya revisarás tú con calma los errores de contenido y estilo? La respuesta también es no, o bueno, podría hacerlo, pero entonces no te habrá servido de nada el dinero invertido en la corrección, porque si después tú, u otro corrector o editor, hacéis cambios en el texto se generarán nuevos errores y erratas que habrá que volver a corregir… y pagar.

Como ves, el orden de las correcciones no es que sea importante, es que es esencial. Variar el orden de las correcciones es como pretender empezar a construir una casa por el tejado: todo el trabajo realizado se va a desmoronar en algún punto.

En cada tipo de corrección se buscan problemas de distinto tipo y las lecturas que se hace en cada fase son muy diferentes.

Si se insiste en acumular los distintos tipos de corrección en una sola etapa del proceso, o bien prescindir de alguno de ellos, la calidad del texto se verá afectada.

Aunque es habitual que se contraten varias correcciones a un mismo corrector (de estilo y ortotipográfica, suele ser lo normal) el corrector profesional hará como mínimo una lectura para cada tipo de corrección. Y también, salvo excepciones, las cobrará por separado. Tenlo en cuenta.

Extraído de la página Una editora

viernes, 26 de agosto de 2022

EDITOR

 


Cuando a uno le preguntan si es editor, resulta difícil contener un íntimo estremecimiento. En principio, el editor es, sin duda, el actor menos querido de todos los que se mueven en el universo del libro. Lo odia el autor por tratar de erigirse en juez y tener la osadía de señalar defectos en la excelsa perfección de su original. Lo odia el dueño de la editorial por el dinero que le cobra para hacer un trabajo que –sospecha– es prescindible. Lo odia el corrector porque nunca está conforme con la limpieza del texto y da órdenes como si fuera superior. Lo odian el diseñador y el diagramador por su quisquillosa manía de hacer exigencias para que el discurso visual se corresponda con el contenido del texto y el público al cual estará dirigido. Y finalmente lo odia el lector con el más fulminante y terrible de los odios: el olvido.
Cuando el libro está terminado y es un rotundo pedazo de realidad que se ofrece en un anaquel o en la pantalla de un artefacto electrónico, se suele aplaudir o repudiar el trabajo del autor, el ilustrador, el diseñador, el corrector, el diagramador, el impresor o el programador. Pero el editor se ha esfumado.

jueves, 25 de agosto de 2022

FUNCIONES DE UN CORRECTOR DE TEXTOS

 



¿Qué puede y no puede hacer tu corrector de textos durante un proceso de edición?
🔹
Tu corrector no puede cambiar tus ideas ni mucho menos añadir las suyas. No es autor ni coautor. Lo que sí puede hacer es ayudarte a pulir tu escritura para que el texto diga exactamente lo que deseas que diga.
🔹
Tu corrector puede modificar ciertos aspectos de tu prosa y tu contenido, siempre y cuando sea bajo mutuo acuerdo, o bajo la supervisión de otro profesional (en caso de que no desees ser parte del proceso de corrección).
🔹
Tu corrector no puede desprestigiar tu puesto como autor. Aunque esté en desacuerdo con tus ideas, su trabajo es respetarlas y apreciarlas. También tiene que respetar tu estilo, tu forma de decir las cosas.
🔹
Tu corrector nunca dará por sentado lo que sabe y lo que no. Por eso te pedirá que aclares sus dudas constantemente. Si tu corrector asume que un término o una oración solo puede ser de una manera, entonces está imponiendo su criterio.
🔹
Tu corrector debe tener suficiente sensibilidad para tratar contigo y tu texto. Debe sugerir, no someter.

viernes, 27 de mayo de 2022

ENTREVISTA AL AUTOR DE LA ÚLTIMA PLAGA EN YOUTUBE

 

Os dejamos la entrevista que le hicimos al escritor Iñaki Marañón que nos explica el proceso de escritura de su última obra: "La última plaga: el virus de los idiotas", que hemos publicado en Editorial C&M.

Una entrevista desenfadada, con mucho humor, sarcasmo, lo vais a pasar bien viéndola. Y si os gusta la entrevista, más os gustará el libro. 

No os lo perdáis.



lunes, 16 de mayo de 2022

LA ÚLTIMA PLAGA (EL VIRUS DE LOS IDIOTAS)

 


Ya está a la venta el nuevo libro del autor Iñaki Marañón titulado: LA ÚLTIMA PLAGA (EL VIRUS DE LOS IDIOTAS), publicado por Editorial C&M.

Os dejamos la entrevista que le hemos hecho, para que conozcáis un poco más sobre el autor.

¿Podrías contarnos quién es Iñaki Marañón?

Realmente creo que es un personaje de mí mismo, ya que exactamente ni me llamo ni me apellido así. Es más cómodo, es como ponerse un uniforme de trabajo. La diferencia es que con este uniforme de trabajo hago lo que quiero y como quiero.

 

¿Qué te aporta la escritura?

Lo mismo que la naturaleza, sentirme más humano.

 

¿Cómo fueron tus comienzos en la escritura?

Con bolígrafo. Creo que entonces todavía había dinosaurios como animales de compañía… Escribía poesía con bolígrafo. Desde pequeñito, tendría unos diez años.

 

¿Te inspiró alguna persona o alguna situación en particular?

Supongo que sí, porque si no, no lo hubiera escrito. Pero no recuerdo el qué. Sí que recuerdo los primeros versos.

 

¿Podrías compartir con nosotros alguna anécdota relacionada con la época en la que la escribiste tu obra?

Sí, además eso era muy interesante, porque cuando contaba a mis cercanos de qué iba el asunto, les divertía y les interesaba mucho, y cada uno tenía sus propias teorías. Lo que sí recuerdo bien fue haber preguntado a varias personas cuántos idiotas creían que había en el mundo. Lo primero, sonreían; después decían que muchos. La cifra más habitual era mil millones de idiotas, tal vez porque es un número muy redondo.

 

¿Cuál es tu proceso de documentación?

Depende del formato y de la historia. En este caso todo el proceso arranca con la pregunta: «¿Qué pasaría en el mundo si de repente surgiera un virus que solamente afectase a los idiotas?». A partir de ahí mucho internet para saber cómo era una pandemia mundial, cómo se contagiaba la gente, cuántas olas podía haber, cómo se podían comportar los políticos, los países, cómo hacer mascarillas, en cuánto tiempo se podía diseñar una vacuna… Esas cosas. Si me espero un año me hubiera ahorrado todo el proceso de documentación, pero no hubiera escrito la novela.



 ¿Existe un horario propicio para ponerte a escribir o cualquier momento del día es ideal?

Cualquier momento del día es bueno. Lo que sí puedo recomendar por experiencia es que mantener un horario habitual ayuda a centrarse más y mejor.

 

¿Cómo surgió la idea de tu novela?

Trabajando, sobre las cuatro de la madrugada. Era una actividad que permitía conversar mientras trabajábamos, y surgió la idea de: ¿Te imaginas que apareciera un virus que solo contagiase a los idiotas? Nos hizo tanta gracia la ocurrencia que me pareció muy adecuada para una buena historia. De hecho, a la semana ya tenía estructurada más de la mitad de la novela.

 

¿Qué van a encontrar los lectores entre las páginas de tu obra?

Muchas letras, espero que bien puestas. Además de eso, espero que también mucho humor, y mucha reflexión a través del esperpento.

 

¿Para qué tipo de lectores escribes?

¡Menuda pregunta! La verdad, nunca me lo había planteado. Pero creo que a todo aquel que le guste leer y tenga una edad adecuada. Intento escribir historias que abarquen un amplio espectro.

 

¿Algún género literario que te apetezca experimentar y aún no te atrevas?

No es por no atreverme, pero todavía no he escrito ninguna obra de teatro, y eso sí que me apetece.

 

Lo mejor que te ha pasado en tu andadura literaria y lo peor que has vivido en el camino de darte a conocer a los lectores.

Si cuento como andadura literaria desde que empecé a escribir mis primeras letras de niño, sin duda de más joven haber ligado gracias a la poesía. Al final no hay mayor medalla que vivir experiencias.

Y lo peor de darme a conocer es todo el tiempo que hay que invertir en ello para captar la atención de la gente. ¡Si a mí lo que me gusta es escribir!

 

¿Qué estás leyendo actualmente?

Ando tan liado últimamente que no tengo tiempo más que para información como labor de documentación. Pero como me gusta sobre lo que me informo, pues también disfruto.

 

¿Cuánto tiempo le dedicas a escribir?

Cuando estoy en época de escritura intento como mínimo una hora al día. Tampoco tiene por qué ser mucho más. El hecho de ver la continuidad ayuda a no querer fallar un día, a la vez que la mente recuerda mejor dónde ha dejado la historia. Una hora al día son casi 200 horas de escritura en medio año, tiempo suficiente para escribir una novela (dependiendo del tamaño).

 

¿Qué hay que hacer para ser un escritor?

¿Quién soy yo para contestar a esa pregunta? Mi novela va exactamente de lo contrario a dar una respuesta a esa pregunta. Si lo supiera te lo diría, pero hay tantos tipos de escritores, cada uno con su manera, que resulta complicado contestar. En mi caso, escribo cuando quiero contar algo. De más joven contarme cosas que incluso solo podían ser para mí mismo. Pero hoy en día prefiero contar cosas para todo el mundo.

 

¿Cuáles son tus métodos de promoción de tu obra?

Vivo en una casa en medio de un monte de una zona perdida de la España vaciada. Hay días que he visto más jabalíes que personas, y no es un chiste. Y la verdad, apetece poco viajar a las grandes ciudades. Así que el método es internet, radio, prensa y televisión. Cada medio con su especificidad, y a poder ser todos los formatos coordinados.

 

¿Tienes más proyectos en mente?

Sí, hacerme millonario con todo esto, y que la huerta de mi casa la tengamos este año tan hermosa como el año pasado.




martes, 19 de abril de 2022

Presentación de la obra MADRID CANELA 1966

 


Este viernes 22 de abril en la Feria del Libro de Huelva, Plaza de las Monjas, a las seis de la tarde, se hará la presentación de la obra Madrid Canela 1966 del autor onubense Cayetano Santana.

La presentación estará a cargo de Juan Carlos de Lara. Es una buena ocasión para acudir y conocer un poco más sobre la faceta del escritor y poder llevarse un ejemplar firmado.

Os dejamos una reseña en el diario digital de Huelva.


viernes, 1 de abril de 2022

ENTREVISTA AL AUTOR CAYETANO SANTANA

 


Acabamos de publicar la nueva obra del escritor Cayetano Santana titulada MADRID CANELA 1966. Una obra que no va a dejar indiferente al lector. Hemos charlado con el autor sobre algunos aspectos de su creación y la entrevista se ha convertido en unas reflexiones que nos ha regalado y que espero puedan disfrutar para conocer un poco más de la semblanza del escritor onubense. 


¿Podrías contarnos quién es Cayetano Santana?

Esta pregunta es muy fácil, porque tengo un DNI, pero muy difícil porque remite al enigma del autoconocimiento, algo que ha llegado a ocuparnos y obsesionarnos de tantas y tantas maneras distintas a través del arte, la cultura y la ciencia. Pero, vamos, que soy uno, como tantos, que piensa que son las obras las que son amores, y no tanto las buenas intenciones. Así que, en el camino nos encontramos...

 

¿Qué te aporta la escritura?

Me interesa más saber que aporta a otros mi escritura, porque para eso escribo. Si fuera para mí, no lo necesitaría... Y lo digo con sinceridad, porque no creo escribir por lo que me aporte a mí. Es cierto que también saco tajada, saco de los encuentros con los lectores, de las humildes satisfacciones que nacen del reconocimiento sincero de los lectores. Con eso me doy por satisfecho.

 

¿Cómo fueron tus comienzos en la escritura?

Empecé durante el bachillerato, con la revista o periódico del instituto. Descubrí que se me daba con cierta facilidad. Así fue cómo empecé. Luego participé en la revista cultural de la Facultad de Filosofía, en Sevilla. Por entonces, me puse a escribir una novela que me ocupó muchos años, porque regresaba a ella, sin continuidad, me faltaba algo así como la serenidad necesaria. Aquello se prolongó mucho, pero logré acabarla cuando retomé con fuerzas mis ganas de escribir, solo entonces pude acabarla. También es cierto que escribí un libro de poemas, que nunca he publicado.

Esa primera novela se quedó inédita, porque aquel Cayetano que había conseguido terminarla ya era alguien muy distinto a aquel otro que la había empezado. Lo que importaba es que ya estaba de vuelta en el territorio de la escritura y seguí y seguí. Así descubrí que debía contar y compartir algunas historias y personajes. El impulso me llevó a escribir Las mujeres imposibles y ya continué hasta Madrid Canela 1966.

 

¿Te inspiró alguna persona o alguna situación en particular?

Uno siempre escribe a partir de sí mismo, se podría decir que uno mismo es el material en bruto a partir del cual se debe crear, encontrar un estilo y hasta una visión del mundo que compartir, algo que va de encontrar una forma de entender el relato, un cúmulo de cosas que te hace ser o no ser escritor. Ser escritor es algo distinto a publicar un libro.

Pero tu pregunta va también de las influencias y los modelos. Aquí fue quizá Rayuela de Julio Cortázar, el libro que más me impactó para amar y querer escribir. Luego han venido muchos más, Kundera, Pla, Vila-Matas... De todos modos, yo también bebo de la filosofía, en el sentido de que no cultivo el estilo por sí mismo, sino que le doy mucha importancia al contenido en lo que escribo.



¿Podrías compartir con nosotros alguna anécdota relacionada con la  época en la que escribiste tu obra?

Qué difícil. A ver, suelo escribir o más bien pulir y pulir mis escritos en alguna cafetería tranquila y me ha pasado que algunos vocingleros se sentían molestos por ver a un tipo con ordenador. A alguno les he oído decir que debía ir a trabajar a casa. También he tenido que descubrir que la importancia de divulgar y salir a hacer promoción, o la importancia de revisar y revisar, mejorar y mejorar aquello que escribo.

 

¿Cuál es tu proceso de documentación?

Mis libros no son de los que tienen una documentación especial o muy relevante. Quizá tiro más de mis intuiciones y conocimientos de la condición humana, de la indagación psicológica, de las ideas más relevantes que inspiran nuestra forma de ser... Mi documentación principal es ese cúmulo de reflexiones que me proporciona mi formación filosófica.

 

¿Existe un horario propicio para ponerte a escribir o cualquier momento del día es ideal?

No, en mi caso no vale cualquier momento. A mí me va muy bien la media mañana y el atardecer. En realidad, suelo escribir acompañado de una buena cerveza y una copa de vino, con el estómago vacío, por supuesto.

 

¿Cómo surgió la idea de tu novela?

Es difícil de decir. Madrid Canela 1966 surge a partir de un tipo humano, que a mí se me impuso como el hombre que quiso ser Nietzsche. Yo mismo, es cierto, fui nietzscheano, así que no me era muy lejano el tema. Por otro lado, me apetecía mucho escribir una novela que no estuviera en primera persona, que tuviera trama detectivesca, intriga, una novela que tuviera una estructura compleja... Así fue cómo he construido lo que se llama un artefacto literario, con múltiples personajes girando alrededor del centro del protagonista.

 

¿Qué van a encontrar los lectores entre las páginas de tu obra?

Espero que una experiencia gratificante, que les atrape y cautive, pero que a la vez pueda incluso instruir, porque me gusta entrar en diálogo con los lectores. Es una obra que admite muchas lecturas, con muchos planos... Una obra que pretende ir del corazón a la cabeza, para que la literatura sea un vehículo que nos permita a todos ampliar nuestro mundo, vivir más, vivir vidas ejemplares y a la vez criticables.

 

¿Para qué tipo de lectores escribes? ¿Algún género literario que te  apetezca experimentar y aún no te atrevas?

Puede ser que uno comience a escribir para ese lector ideal que está como agazapado en su interior. Luego cabe que nos abramos verdaderamente a los lectores, lectores indefinidos, ese público lector que imaginamos muy amplio. Mis libros no son para lectores que lean al peso, casi para evadirse, mis libros creo que exigen un paladeo detenido, un paladear que espero que aúne saber y sabor.

Me preguntas también por mis proyectos, y te cuento: Después de dos novelas, me apetecía escribir un ensayo, un libro de introducción a la filosofía. Y en ello andamos, dando los últimos retoques. También me apetecía escribir relatos breves, ya sabes, el género de los cuentos... Y creo que verá la luz una obra con algunos de ellos. Después de esto, no sé por dónde seguiré, quizá vuelva a la novela, o no, quién sabe...

 

Lo mejor que te ha pasado en tu andadura literaria y lo peor que has     vivido en el camino de darte a conocer a los lectores.

Lo mejor que me ha pasado es, sin duda, el contacto con los lectores, en las ferias del libro, en las presentaciones, es muy gratificante... Te regalan la gratitud por haberte leído, se reconocen en los personajes, recuerdan sus experiencias...

¿Lo peor? Quizá lo difícil que resulta llegar a la gente sin que uno mismo vaya detrás de su libro. Aquí se empieza desde abajo, y llegar a tener un marchamo, un éxito, que se aprecien tus libros en muchos lugares... Eso es lo más difícil, tarea de años de lucha con y contra uno mismo.

 

¿Qué estás leyendo actualmente?

He terminado una biografía de García Lorca, ando leyendo un ensayo que se titula Los peligros de la moralidad y tengo a Primo Levi y su obra Los hundidos y los salvados esperándome.

 

¿Cuánto tiempo le dedicas a escribir?

No podría decirte, porque depende del tiempo que me deja el trabajo. Además, cuando se va a sacar una novela, como ahora, todo el tiempo se te va en corregir las pruebas de imprenta, dar el visto bueno a la edición.

 

¿Qué hay que hacer para ser un escritor?

Creo que no pretender ser un escritor. No creo en eso de ser escritor, uno escribe, por supuesto, pero debe ser muchas cosas más. No conviene obsesionarse, hay mucha gente que sueña con escribir y no suele hacerlo. Otra gente no sueña tanto, se esfuerza y va y lo consigue.

 

¿Cuáles son tus métodos de promoción de tu obra?

Creo que ninguno. Trato de estar, a disgusto, porque no me gusta, en las redes sociales. Estoy por mi obra, exclusivamente, quiero decir. Y eso se nota, eso hace que la utilice menos de lo que recomiendan los expertos en marketing. Me gustaría creer que la verdadera promoción sea el valor de mi obra. Eso sí, me gusta el contacto directo de las presentaciones, las ferias del libro... Estuve en la conocida Prisión Sevilla 1, y fue gratificante poder compartir mi obra con los internos. También considero importante la labor de las reseñas, de los foros de lectura... También me encanta dar conferencias e incluso me ofrezco a los clubes de lectura, algo que me parece magnífico.

 

¿Tienes más proyectos en mente?

Los que te comentaba antes, dar a luz el ensayo de introducción a la filosofía y mi nueva obra literaria, los cuentos. Esos son mis proyectos, uno más avanzado y otro en marcha.


La obra Madrid Canela 1966 ya está en distribución y la pueden adquirir en cualquier librería o en las plataformas digitales.