sábado, 16 de junio de 2018

Opinión de correctores



¿Y qué pasa cuando un autor descubre alguna errata en un texto cuya revisión ya ha pagado?
Pues sucede que… nadie es perfecto. En un mundo ideal, una novela o una tesis necesitarían por lo menos cuatro lecturas, a ser posible de cuatro pares de ojos diferentes, para llegar totalmente limpias a imprenta. Aun así, algún duende de la imprenta metería su mano perversa al final. Los correctores decimos que las erratas son las últimas en abandonar el barco. La errata que se escapó, esa cucaracha invencible, le duele al corrector más que al propio autor.
Carmen Palomo, correctora.

sábado, 2 de junio de 2018

Cualidades de un corrector ortotipográfico





Cualidades que reúne un buen corrector de textos

  • No teme al silencio ni a la soledad. De hecho, la elevada concentración que requiere su trabajo a menudo le lleva a aislarse durante el desarrollo de su actividad.
  • Duda de todo, incluso de sí mismo. Es un especialista de la lengua, pero eso no quiere decir que lo sepa todo: un buen corrector se acompaña de diccionarios y obras especializadas y consulta constantemente los recursos virtuales. A menudo comprueba casi cada palabra de una frase.
  • Es una persona curiosa, con cultura general, por supuesto, pero especialmente con muchas ganas de aprender sobre toda clase de materias.
  • Tiene buen oído para buscar la cadencia idónea en el texto.
  • Es paciente: a menudo es un trabajo arduo y algunas erratas pondrán sus nervios a prueba.
  • Es una persona firme para defender la limpieza del texto, pero flexible para entender los intereses particulares de cada autor.
  • Siente un gran amor por la lectura y por la palabra escrita.